Recargué mi cabeza sobre la ventana del autobús. Desde la biblioteca hasta la estación de gasolina. La calle por la que voy y vengo diariamente, el panorama al que me he familiarizado. ¿Llegará el día en que deje este escenario frente a mí? Se sentía imposible juzgar el mañana o esperar algo.
Una mujer con una liga de cabello amarillo que mantenía su cabello en una coleta, se sentó frente a mí. Sus hombros se elevaron y volvieron a caer como si hubiera suspirado. Recargó su cabeza sobre la ventana. Desde hace un mes ya, estudiaba en la misma biblioteca y tomaba el autobús desde la misma parada que yo. Aunque nos habíamos dirigido la palabra, observábamos el mismo panorama, vivíamos en lo mismo, y suspiramos ante lo mismo. En mi bolsillo aún se encontraba una liga de cabello.
Esa mujer siempre se bajaba tres paradas antes que yo. Cada vez que la veía salir del autobús, me preguntaba si seguiría repartiendo volantes. ¿Qué habrá experimentado? ¿Con qué clase de cosas se tendrá que enfrentar? ¿Qué tan seguido sentirá esa sensación de que el mañana no llegará, esa sensación de desalación que no estuvo desde el principio? Pensé sobre eso.
La parada de autobús en la que ella solía bajar se acercaba. Alguien presionó el botón de parada, y pronto los pasajeros comenzaron a levantarse de sus asientos. Sin embargo, la mujer no estaba entre ellos. Mantenía su cabeza apoyada sobre la ventana, sentada. Parecía que se había quedado dormida. ¿Debería despertarla? Tuve un conflicto interno por un momento. El autobús llegó a la parada. La mujer seguía igual. Las personas bajaron del autobús, las puertas cerraron y el autobús siguió su camino.
La mujer no se despertó por las próximas tres paradas. Volví a tener el mismo conflicto mientras se acercaba mi propia parada. Era claro que nadie más le prestaría atención una vez que yo bajara. Estará muy lejos de su parada habitual antes de que despierte, y no sabría si estaría aún más cansada debido a eso.
Me bajé del autobús y comencé a caminar hacia la estación de gasolina. El autobús se marchó y no mire atrás. Dejé la liga del cabello sobre la mochila de la mujer, pero fue todo. Ese no era el principio ni el final. Nunca fue nada desde el principio, y no había motivo para que lo fuera. Así que pensé “no significa nada en realidad.”
"Traducción al español por @7Valeria_7 para Universo Bangtan y Map of the BU. Traducción al inglés por @writer_court para The BTS Effect. No distribuir sin respetar TODOS los créditos."